sábado, 24 de septiembre de 2011

MEMORIAS 19

El patrimonio intangible, sostiene su vigencia en el tiempo si se conservan los escenarios y otros testimonios materiales sin los cuales perdería su sentido. Las festividades religiosas, de fuerte raigambre espiritual y por lo tanto inmaterial, no podrían concebirse sin tales bienes culturales.
Hasta hace un par de años, la tradicional procesión de la Virgen de las Mercedes, se realizaba en torno de la Plaza Solares casi del mismo modo en que se desarrollaba en tiempos en que la estancia comenzaba a convertirse en una villa.










El profundo significado de esta jornada religiosa, excedía (y excede) lo urbano como puede leerse en la detallada descripción realizada por Juan Cafferata en su libro "De la Córdoba de Ayer" editado en 1949 por la Imprenta de la Universidad de Córdoba:

"Era un día de Setiembre de 1887.
La fiesta de la Patrona, la Virgen de las Mercedes, tenía revuelta la población de Alta Gracia. Los devotos llegaban de todas partes, para asistir a la misa cantada del 24, acompañar a la Virgen y si era posible, para cargar las andas, en la procesión de la tarde. Grupos de paisanos bajaban la sierra. Montaban mulas y caballos, peludos, por las heladas; flacos por la escasez de pasto, en el invierno seco, alimentados con chala de los rastrojos del maíz."


Con los trabajos de remodelación de la Plaza Solares, el año pasado hubo que mudar la procesión a la Avda del Libertador, decisión que este año volvió a reiterarse debido a un detalle que no fue tenido en cuenta por quienes tanto empeño pusieron para que el pórfido patagónico triunfara sobre otros materiales naturales regionales o artificiales pero más funcionales: el desfile de las agrupaciones gauchas. 
Aparentemente, la textura de esta roca, no sería la más apropiada para que los caballos puedan transitarla sin correr el riesgo de sufrir un accidente, con lo que arribamos a un nuevo fracaso de esta  inapropiada intervención, que desde el discurso teórico seguirá pretendiendo "unificar" el centro histórico, cuando la realidad demuestra que lo está disgregando.
De algún modo, las recomendaciones originales de "La Comisión" impulsando el diseño de una plaza exclusoria del vecino, pensada para un "turista" abstracto, han triunfado lateralmente. El espacio público arrebatado a los ciudadanos, replanteado para la incomodidad y el aburrimiento perceptual, monotonamente concebido como una sala de exhibición del Patrimonio de la Humanidad, desconectado de la gente y sus necesidades cotidianas.
Desde lo turístico cultural, que la fiesta patronal de la ciudad de Alta Gracia, haya perdido su contexto patrimonial para destinarla a uno de los paisajes urbanos más anodinos que posee, resulta inadmisible y censurable.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

A este maravilloso espectaculo ponganles adelante los arboles y al lado el Hotel La favorita y..............se acabo la maravilla!!!!

Walterio dijo...

¿Únicamente el Hotel La Favorita? Creo que es justamente por falta de árboles que se ve todo el tiempo. ¿Qué queda por decir de los dos edificios en construcción? el contiguo a la escuela Maestro Bútori y el inexpresivo engendro vecino a la heladería. ¿Y el monstruoso galpón donde ahora funciona el Espacio Solares? Por suerte, los árboles de la plaza hoy disimulan un poco su presencia ¿Y la desprolija sede del restaurante La Familia?
Creer que con achicar los carteles y toldos sin mantener un criterio de diseño y pintar las fachadas, se recupera el entorno de la plaza es de una gran ingenuidad. Esto precisa un proyecto más serio y profundo que enfrentará problemas de dificil resolución como consecuencia de las inadecuadas decisiones tomadas por el Consejo Deliberante de permitir excepciones a la normativa vigente y aprobar un proyecto de plaza que no contemplara una intervención integral.

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo!! los arboles sirven para "cubrir"; el problema es que asi se tira el agua sucia adonde se lavo el nene, con el nene. Es evidente que hace falta una estrategia para un cambio paulatino de los horrores que rodean el conjunto jesuitico. De todos modos no es con comparaciones que se solucionan los problemas, los mismos se afrontan con analisis. Las excepciones a la normativa vigente cree que es suficiente? porque seguramente hay una normativa nacional sobre la proteccion de los bienes arquitectonicos y los permisos deben ser subordinados a los mismos.

Walterio dijo...

Anónimo: La estrategia a que usted hace referencia y estaría faltando se llama PLAN DE GESTIÓN DE SITIO, otra de las exigencias de la UNESCO que en Alta Gracia, brilló por su ausencia como marco de referencia obligatorio para el rediseño de la plaza.

Está claro que las cosas no se están haciendo bien y que la naturalizada improvisación podría poner en riesgo la designación conquistada.

javier dijo...

no estaría de mas la identificación pormenorizada de los propietarios, arquitectos y desarrolladores de los inmuebles generosamente beneficiados con las excepciones de marras, sin olvidar de los diligentes concejales que aprobaron la iniciativa.creo que la plusvalía lograda por los inmuebles en cuestión (el lote contiguo a la escuela Butori era de valor prácticamente nulo, previo a la modificación de sus posibilidades de edificación)

Walterio dijo...

Es cierto Javier porque, como si fuera poco, la mayoría de estas construcciones carecen del cartel de obra de rigor con el nombre de sus proyectistas y directores técnicos, pareciera que el anonimato fuera conveniente, a sabiendas que están hechas por la vía de la excepción y con una clara intención especuladora. Otro dato lamentable es que una de ellas corresponde al estudio cuyos integrantes participaron del diseño del tan poco feliz faro del Bicentenario, (parientes de políticos locales para variar). El nepotismo desilustrado avanza a pasos agigantados.