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En la vigésima primer semana de trabajo, los cambios más notables se registraron en las calles perimetrales: la colocación del pórfido patagónico avanzó un 40% sobre calle España, mientras que en la Avda Belgrano se removieron los cordones para construir las cunetas que los suplantarán.
Se materializó gran parte de la diagonal que conecta el centro de la plaza con la esquina de España y Rafael Lozada, finalizando canteros y muros de contención de suelo, también se instalaron las columnas en las que se montarán los artefactos de iluminación.
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. Retrasada, la obra continua generando inconvenientes en el tránsito vehicular y peatonal, pero lamentablemente la demora no es producto del cuidado puesto en la calidad de los detalles, hasta una mirada poco entrenada para el control técnico podrá coincidir en que lo poco que se puede observar, no se destaca en precisión, prolijidad y virtuosismo.
Una vez más la incumplida promesa de la inauguración en septiembre, interrumpirá otra de las tradiciones locales: la Procesión de la Virgen de las Mercedes, todo sea por seguir adelante con este increíble proceso de "esterilización" del espacio público, que en meses se podrá corroborar. Mientras tanto, el entorno de la plaza, que para las autoridades resulta invisible, sigue erizándose de inadecuadas construcciones en altura con antiestéticos paredones medianeros, sobre los que ningún miembro de "La Comisión del Patrimonio", presenta queja alguna.
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